miércoles, 11 de noviembre de 2009

Friedrich Nietzsche

Ven ésta noche conmigo
a danzar en las sombras del averno,
donde un malévolo cuervo
nos vigila esperando un descuido.
Ven conmigo ésta noche,Muerte
que los ángeles proscritos
vienen descalzos a recibirte
con mis restos podridos.
Ve conmigo ésta noche, Señora Muerte
que el Señor de la Niebla quiere poseerte
y como cuentas ya con mi cuerpo profanado
hasle el amor y desangralo como al ganado.